lunes, 14 de enero de 2008

La Comedia Con Mónica Ayos Agrada

La Comedia Con Mónica Ayos Agrada
La comedia "En la cama", escrita y dirigida por José María Muscari e interpretada por Gerardo Romano, Viviana Saccone, Mónica Ayos y Walter Quiroz, es un muy disfrutable espectáculo apto para el verano y la avenida Corrientes.
En él hay dos parejas -la mayor, Romano y Saccone, la otra, Ayos y Quirós- ocupadas en sus vivencias personales de individuos sin carencias económicas y presas de todas las inquietudes de moda: el sexo, el consumo, el matrimonio, la filosofía instantánea. Así, Romano es un hombre en apariencia asentado en sus convicciones que fantasea con nuevos rumbos sexuales para su pareja, acicateado por un grupo de autoayuda al que dice concurrir. Saccone, su esposa snob, tiene como primer interés su papel de madre -Muscari se divierte bautizando Tamir a su hijo- y su sensualidad se ve bastante diluida luego de 17 años de casada. Ayos es la espléndida hembra que mantiene rasgos de inocencia, capaz de engullir en escena un licuado con vainillas -y no engordar, dice su marido-, toma el sexo como algo natural y tiene como sueño transformarse en una buena guía de turismo. Por su parte, el inmaduro Quiroz está profundamente enamorado de su esposa, al punto de evitar por todos los medios el embarazo, para que un hijo no venga a interferir en su relación. Esos puntos de partida le permiten a Muscari transformar el escenario en un campo de juego donde todo está permitido, sobre todo la imaginación y la fantasía: el director refuerza las ambigüedades interpelando al público y haciendo que personajes e intérpretes intercalen sus identidades. Hay una continua apelación a la platea -las actrices enfrentan a la asistencia desde muy cerca y con preguntas comprometidas- y breves desnudos, así como cuestiones de autorreferencia que buscan la complicidad de los cholulos. Como es de suponer, las dos parejas terminarán atrayéndose por un hecho fortuito -el traspaso de un departamento- y lo que debe suceder sucede... sobre todo en la mente del espectador, que se sorprenderá al saber que lo que acaba de ver no sucedió. Porque esos cuatro personajes -con los que Muscari crea hacia el final una pequeña y divertida "Virginia Woolf" muy paqueta- parecen muy liberados y a punto de transgredir los mandatos sociales, pero tienen los mismos miedos y pudores que el espectador que está enfrente. De allí las certeras carcajadas que coronan ciertos diálogos -son las carcajadas más inteligentes en lo que va del año teatral-, porque la mayor virtud del autor es descubrir y deschavar las pequeñas vergüenzas, los pequeños pecados, los pequeños secretos de la clase media. Es que a lo largo de su corta pero intensa trayectoria Muscari (31 años) tiene un ejemplar manejo de lo teatral y ha sido capaz de la astracanada más letal -"Catch, lucha en el barro y sexo entre mujeres"- así como de lirismos melancólicos -"Shangay"-, en un amplio abanico de pulsiones, ya que lo suyo traspasa los géneros. Lo que se nota al apreciar "En la cama" es su indagación en el interior de la pareja y el profundo goce que le produce el hecho teatral de sensibilizar a sus criaturas y hacerlas disfrutar a su vez de los vericuetos del texto. Y, sobre todo, los suyo es dosificar el ritmo: pocos directores argentinos pueden lucirse con él en esos menesteres, ya que no se trata de crear un movimiento permanente, sino de captar la palpitación y el aire que contribuyen al equilibrio de una puesta. "En la cama" se ofrece en la sala 4 del complejo Multiteatro (Corrientes 1283) de miércoles a domingos a las 21.30, con una función extra los sábados a las 23.30.

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